Recorriendo Bogotá: Bogotá rural, una frontera invisible entre Ciudad Bolivar y Usme

Se conoce Bogotá como la capital de Colombia, una ciudad muy grande donde viven casi 10 millones de personas, una ciudad bastante caótica sobre todo debido a su sistema de transporte. Sin embargo, Bogotá también tiene una parte rural, una zona bastante desconocida incluso por los propios Bogotanos, algunos de los cuales no irían para evitar pasar por ciertos barrios de mala fama. 

Afortunadamente ing3nio Tours, que se está convirtiendo en mi agencia favorita, organiza recorridos por esta parte de Cundinamarca y tuve la ocasión de poder participar en un de ellos el pasado 1 de diciembre.

Después de reunirnos todos para coger el Transmicable, un teleférico que opera desde hace aproximadamente un año, "sobrevolamos" y llegamos a Ciudad Bolivar, un barrio más conocido por lo malo que por lo bueno. En las fotos, se puede apreciar lo coloridas que son las casas que lo conforman. Tal y como nos lo explicaron, se trata de una de las zonas más pobres de la ciudad y el color ayuda a darle alegría y a esconder la pobreza, algo también típico de las favelas en Brazil por ejemplo. 

Desde allí nos subimos a una furgoneta que nos llevo por las 7 veredas de Bogotá: Quiba Baja, Quiba  Alta, Mochuelo Bajo, Mochuelo Alto, Pasquilla, Pasquillita y Las Mercedes.

No sé si será por la estética del campanario de la iglesia, que representa un faro, o por otra cosa pero estar en Quiba Baja, que significa "Bosque Hermoso", me encantó (a pesar del frío, pues estábamos a más altura que en Bogotá). El arquitecto se inspiró de la ciudad de Cartagena de Indias, en la costa caribe para reproducir también las torres de vigilancia. De allí también se tiene un panorama increíble sobre la ciudad y se puede apreciar el estilo español-colonial de algunas construcciones.

A continuación, después de detenernos en establecimientos donde vendían fresas y productos lácteos artesanales, fuimos hasta Pasquilla, un lindo pueblo donde aprendimos a hacer cuajada, la cual degustamos luego.

                         

Acompañados por Cesar, un guía de la región, atravesamos un increíble bosque para llegar al Embalse de la Regadera, que hace parte de Ciudad Bolivar y Usme a la vez... uno no sabe muy bien cuando pasa de una localidad a otra. La naturaleza en estado puro con multitud de flores y árboles:

A continuación almorzamos en Usme pueblo, otra localidad muy cercana a Bogotá, donde visitamos la plaza principal. 

Estando en esta zona, uno tiene la impresión de encontrarse a varias decenas de kilómetros de la capital y sin embargo, está muy cerca. Fue una gran bocanada de aire fresco y limpio que le permite a uno desconectarse lo suficiente antes de volver a un mundo ruidoso.

Espero que les haya gustado, ¡y que comenten!