lunes, 30 de marzo de 2015

La Fragilidad de la Vida


Ayer hablaba con una amiga que me decía “no me creo nada pero me lo creo todo”. Yo, por el contrario, digo “me lo creo todo pero no me creo nada”. 

Con la cabeza un poquito más fría que hace casi una semana, cuando recuerdo y analizo los elementos comentados por la prensa desde los primeros minutos después del fatal accidente de avión, temo que estemos nuevamente sometidos a una manipulación mediática y/o político-empresarial. Faltando aún una de las cajas negras por analizar (y encontrar según nos dicen), las cuales estaban al inicio “muy dañadas”, han sacado conclusiones muy (¿demasiado?) claras a una velocidad vertiginosa, señalando a una persona en concreto, la cual, según otras fuentes al principio, tenía un expediente impecable. A continuación, aparece de repente una avalancha de pruebas en contra de esa persona… entre ellas, un parte de baja médica roto (en su piso, claro, ¿cómo iba a tirarlo en otro sitio donde nadie podría encontrarlo?)… mientras se sigue buscando, según cuentan la segunda caja negra, la que justamente registra la actividad de los instrumentos… aunque al parecer la prioridad ya no sea esa. También pienso que los médicos y psicólogos que le habrían atendido conocerían su profesión así como la compañía en la que trabajaba… y ¿no comunicaron a esa empresa los supuestos fármacos que le habían recetado o sus bajas? ¿No tienen entonces, si todo esto es cierto, parte de culpa al no informar de las limitaciones del copiloto para ejercer su trabajo correctamente? Tampoco se habla ya de lo que se comentó en un primer momento y que apuntaba a un fallo en uno de los motores, pues según decían el comandante habría lanzado un mensaje de emergencia. Aparte de eso, ¿habéis notado que esto no ha pasado con un avión nuevecito o que el comandante tuvo que salir del cockpit durante un vuelo de tan sólo 2 horas?... vuelo cuya salida al parecer había sido retrasada media hora. 

No me interpretéis mal pues no digo que esta persona a la que todas las “pruebas” apuntan no sea culpable, pero tampoco pondría mi mano en el fuego de que lo sea, pues cuando pasa una desgracia como está, el ser humano necesita una persona, un rostro a quien culpar. Como en muchos casos (Barajas, Alvia, Metro de Valencia, Madrid Arena, Yak-42, por citar algunos), conoceremos la versión oficial, y nunca sabremos si esta se acerca o no a la verdad y a la realidad de lo que ocurrió… y como el presunto responsable del accidente ya no está, tampoco podrá defenderse. 

Tal y como lo he comentado: puede que el responsable sea efectivamente quien dicen que es, pero también puede que la realidad sea completamente otra y, aunque encontrar al “culpable” sea importante, no devolverá a la vida a las víctimas y no ayudará a sus familias a superar esta desgracia. Allí, cada uno con su consciencia, aunque yo creo en el karma. 

Personalmente, no dejaré de viajar por accidentes de este tipo o de otro. Es más, creo que tendríamos que agradecer siempre tanto a los pilotos como a los auxiliares de vuelos, conductores y azafat@s de cualquier otro tipo de transporte, pues nos hacen la vida más fácil a todos sin que a veces ni siquiera reparemos en ellos. 


Lo que si pasa en cambio es que tal triste noticia me ha hecho reflexionar (un poco más). Todos y cada uno de nosotros tenemos una historia, un pasado, planes por pequeños que sean; todos pensamos que mañana seguiremos aquí y que no pasa nada por atrasar un poco lo que tenemos pensado hacer en un futuro… futuro que a lo mejor nunca llega… o sino que se lo digan a los pasajeros del vuelo 4U9525 del pasado martes 24 de marzo, o si volvemos atrás en la historia, a las familias que fueron separadas de la noche a la mañana por un “muro” en la capital alemana por ejemplo, sin hablar de hechos más dramáticos aún. 

No estamos al abrigo de un accidente, sea el que sea, de una enfermedad o de cualquier tipo de situación que nos impida luego seguir nuestra vida tal y como la habíamos más o menos planeado. Si ya lo tenía claro antes, sucesos como lo ocurrido la semana pasada asientan mi idea de no posponer las cosas que realmente quiero hacer y que son importantes para mí. El “ya iré la próxima vez” a ver tal cantante, el “ya llamaré” a una persona querida, el “ya haré” un viaje para visitar un sitio que siempre me ha llamado la atención, e infinidad de cosas de este estilo quizás nunca puedan llegar a ser por una razón u otra. 

Es verdad, el trabajo es importante pues es lo que nos permite ganar dinero para hacer esas cosas que tanto nos importan… ¡pero no lo es todo! ¡El tiempo de poder llevar estos sueños a cabo es incluso más importante! 

Es cierto que puede que tomemos una decisión de hacer o decir algo a alguien y “nos salga rana” como decís en España, es verdad pero por lo menos, ¡lo habremos intentado! Al final yo creo que solo nos arrepentimos de lo que no hemos hecho. 

Personalmente, me reafirmo con las decisiones que he tomado últimamente porque sé que me han hecho y me harán feliz. Hay que disfrutar del momento porque, al fin y al cabo, la Vida es lo más frágil que tenemos. De hecho, al oír la noticia el martes pasado que todo estaba “pulverizado” según los medios, me sorprendí a mi misma culpándome o más bien preguntándome el significado de querer a veces conservar cosas materiales. Pensé en el último vuelo que cogí con mi pareja, el pasado 20 de este mes. Me preguntaron si deseaba facturar gratuitamente la maleta de cabina que llevaba y contesté que no porque había cosas “frágiles” dentro… ¿Qué me habrían importado estas cosas de haber desaparecido? ¿Acaso eran y son realmente importantes? 

Lo más importante en la vida es eso: la Vida simplemente, y disfrutar de cada momento de felicidad al 100 % es el mejor homenaje que le (y nos) podemos hacer a esta vida.


2 comentarios:

  1. Estoy completamente de acuerdo contigo Karo hay que disfrutar el día a día por que nunca se sabe cuando va a ser el ultimo

    ResponderEliminar
  2. Además el tiempo no se detiene, x eso tienes razon en el vivir el dia a dia y en positivo.

    ResponderEliminar

Cualquier comentario de carácter insultante será eliminado sin previo aviso. Todas las opiniones son bienvenidas en este blog. Sólo se pide formalidad y respeto a la hora de expresarse.

Any kind of insulting comment will be removed without previous notice. All opinions are welcome, we only ask for respect when writing.